Consejos para una limpieza suave La piel de tu hijo está irritada y le pica. Necesita cuidados suaves. ¿Significa esto que debemos dejar el lavado diario? Sigue nuestros consejos para proporcionar a tu hijo un lavado suave, protector y eficaz cada día. La ducha también puede convertirse en un momento de placer en la vida cotidiana.
Eccema y psoriasis: los beneficios del lavado diario
La piel de un niño que sufre de eccema o psoriasis está irritada y debilitada.
Muchos padres y madres piensan que es mejor espaciar los lavados de niños con piel atópica, pero la higiene es necesaria, sobre todo en verano, cuando se acumulan el sudor y el polvo.
Eccema y psoriasis: la forma correcta de lavarse
Eccema y psoriasis: la forma correcta de lavarse sin causar irritación
¡Es posible lavarse sin irritar la piel atópica! Sólo hay que asegurarse de usar las manos y elegir los productos adecuados.
Deja los accesorios
Las manos son la mejor manera de lavar la piel de los niños sin arriesgarse a una mayor irritación. Evita el uso de esponjas o de flores de masaje, ya que pueden causar fricción y agredir la piel ya sensible. Además, estos accesorios de baño suelen ser nidos de gérmenes.
No uses toallas ásperas ni seques con brusquedad
Una vez fuera del agua, evite el secado brusco con toalla. Secar suavemente el cuerpo es la mejor manera de evitar que se reactive la sensación de picor. Esto también ayuda a mantener una cierta cantidad de humedad en la piel, lo que facilita la aplicación de emolientes.
CONSEJOS ESPECIALIZADOS
Eccema y psoriasis: el champú adecuado para el cuero cabelludo
La delicadeza con la que se lava el pelo y el cuero cabelludo de niños es tan importante como la forma en que se lava el resto del cuerpo, sobre todo porque niños suelen tener brotes de eccema o psoriasis en el cuero cabelludo. Elige un champú dermatológico suave para uso frecuente. Evita a toda costa los productos perfumados, ya que pueden irritar el cuero cabelludo ya seco de tu hijo.
Eccema y psoriasis: ¿mi hijo puede bañarse?
Son preferibles las duchas cálidas y cortas. Pero no tienes que evitar los baños por completo. Siempre que el agua esté tibia y no caliente, que no pasen demasiado tiempo en el baño (máximo 10 minutos) y que no utilices productos espumosos y perfumados o aceites esenciales, el baño puede ser un momento precioso de relajación para tu hijo. Después de un largo día en el colegio, es una buena manera de calmarlos, ya que niños con eccema o psoriasis suelen sufrir mucho estrés a diario.
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